Desgraciadamente, aunque el verano es estupendo tiene sus peligros. Uno de los más conocidos son los hongos, que aparecen en los pies y en las uñas. y lo que es peor, es una de las infecciones más difíciles de eliminar. Hay que ser muy constante y paciente en los tratamientos.
Los hongos son organismos que viven a expensas de un huésped en superficies húmedas y calurosas. Se alimentan de materia en descomposición y para ello se sirven de su ‘anfitrión’ en una relación de armonía y, en otros casos, por medio de la infección.
Los que se alojan en el cuerpo humano y no nos hacen bien, a veces se deben a faltas de higiene, al contacto con lugares sucios o se sirven de carencias inmunológicas. Los agentes agresores se resguardan en las zonas con mayor humedad y causan picores, erupciones, salpullidos, eczemas, manchas e incluso ampollas.
la mayoría desconoce de ciertos cuidados que debe tener en su piel no solo por la radiación sino por contraer infecciones como los hongos, ya sea en las piscinas o duchas de las playas, “Dermatitis, verrugas plantares, granulomas, pie de atleta, hongos e infecciones diversas en la piel pueden generarse en las piscinas que no reúnan las condiciones higiénicas necesarias, sobre todo en esta temporada de verano en la que se incrementa la presencia de bañistas”
Es fundamental bañarse después de entrar a la piscina para retirar con agua potable el exceso de cloro y otras sustancias derivadas de la reacción con materia orgánica (restos de piel, orina o cabello) que dan al ambiente ese característico ‘olor a piscina’ y que pueden producir irritaciones oculares y cutáneas, puntualizó. “No olvidarse de utilizar siempre un foto protector solar permanente y replicarlo constantemente, así como mantener siempre la piel humectada con cremas resistentes al agua”.
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